Si estáis establecidos en UK, vuestra vida ya está aquí y no tenéis planes de volver a España en el corto/medio plazo, tal vez os estéis planteando la posibilidad de comprar una casa en este país.
A parte de las notables diferencias entre las viviendas de aquí y las de España, como el espacio, el número de habitaciones, la distribución y, por encima de todo, el precio (especialmente si la idea es comprar en Londres u otras zonas del sur de Inglaterra); hay otros aspectos que son extremadamente importantes a la hora de comprar una vivienda en UK.
Hoy os vamos a hablar de uno de ellos: entender la diferencia entre las propiedades de tipofreehold y las de tipo leasehold.
¿Qué es el freehold?
Si compráseis una propiedad de tipo freehold, estaríais comprando una vivienda “libre”, de la que seríais propietarios al 100%. Esto implicaría que podríais vivir en la casa todo el tiempo que quisiérais, que vuestros hijos podrían heredarla, etc. Además, podríais hacer reformas de todo tipo tanto en la casa como en el terreno.
En pocas palabras, comprando una vivienda de tipo freehold seríais los verdaderos propietarios.
Este sería el tipo de compra al que estamos acostumbrados en España.
¿Qué es el leasehold?
Si compráseis una propiedad de tipo leasehold, lo que realmente estaríais comprando es el derecho a tener esa vivienda por un periodo determinado de tiempo, ya que la casa pertenecería en realidad a otra persona. Esto implica que no podríais vivir en la casa para siempre y que vuestros hijos no la podrían herederar. Además, no podríais hacer muchas reformas ni cambios estructurales, ya que el terreno no sería de vuestra propiedad.
El lease (arrendamiento) suele ser de unos 99 años, aunque a veces puede ser de más de 100 ó incluso de menos de 60, como hemos visto nosotros en algunas ocasiones…
La mayoría de pisos en Inglaterra y en Gales son de tipo leasehold.
Si lo pensáis detenidamente, comprando una vivienda de tipo leasehold no dejaríais de ser “inquilinos”, convirtiéndose en landlord el propietario del freehold.
Y puesto que estaríais viviendo en una propiedad que no sería vuestra al fin y al cabo, a parte de los cientos de miles de libras que hubiérais pagado o que estuviérais pagando a través de la hipotéca, tendríais que pagar un alquiler por el lease, conocido como “ground rent”. El coste de este alquiler puede ser de entre £50 a £300 anuales, dependiendo del tipo de leasehold.
¿Qué pasa cuando se termina el lease?
Una vez que el lease finalizase, la casa que comprastéis dejaría de ser vuestra, ya que la propiedad de la vivienda pasaría de vuelta al propietario del freehold, el dueño real de “vuestra” casa.
Normalmente, sería posible extender el leasehold de la propiedad que comprastéis, pero tendríais que pagar por esta extensión, y ojo, porque los precios no son ninguna broma! Para que os hagáis una idea y según la web moneysavingexpert.com, para un piso de £200.000, una extensión de 90 años más podría costar £7.500, si a la hora de plantear la extensión el leasehold actual fuera de 95 años; y hasta £26.500 si a la hora de plantear la extensión el leasehold actual fuera de 60 años.