A contramano de los locales cerrados, el fenómeno de los showrooms sigue “viento en popa” y se afianza en Capital

15-10-2015 La alternativa del departamento transformado en tienda se impone ante los altos costos que demanda instalar un local comercial. Los empresarios “tradicionales” cargan contra esta modalidad, a la que tildan de irregular. Opciones que se imponen en la red

Con páginas en Facebook, Instagram y hasta sitios online propios, los showrooms se suben a la competencia por restarle clientes a los comercios tradicionales a través de una fórmula que combina precio y calidad.

Si bien este tipo de ferias a “puertas cerradas” opera desde hace años, lo cierto es que las redes sociales y la expansión de la compra por Internet no han hecho más que impulsar este negocio sobre todo en estos tiempos de inflación.

Los showrooms son espacios propios o en algunos casos alquilados para la ocasión, en los que se instalan auténticas “tiendas privadas” a las que accede un número cada vez mayor de personas interesadas en comprar más barato.

Estos ámbitos comerciales sin vidrieras -que buscan quitarle algo de clientela a los puntos de venta tradicionales- se caracterizan por una nada despreciable variedad de artículos, que incluye ropa, zapatos, artículos de cuero, joyas y accesorios. En otros casos, productos de bazar, electrónica y artículos del hogar.

Aunque el surgimiento de estas “cuevas de la ropa” puede atribuirse a una suerte de moda adolescente, hay otro costado que motiva a los dueños de estos emprendimientos a comenzar de esta manera: los bajos costos para montar un punto de venta.

Así, los showrooms aparecen como una alternativa frente a lo caro de instalar un local tradicional. Prueba de esto último son los cierres de comercios que se acumularon en Capital Federal en los últimos dos años.

Más allá de esto, desde estas tiendas reconocen que el showroom representa el paso previo a lo que luego será la apertura del punto de venta a la calle.

Delfina Consani, dueña de Tout Revient, explicó a iProfesional este aspecto: “Como nosotras no teníamos un capital muy grande pusimos el showroom. Al principio, eran ferias en casa. Poner un local a la calle tiene más riesgos comerciales y posibilidad de pérdidas, pero te da masividad. El año que viene si nos gustaría poner un local en Recoleta”.

Quien logró pasar de las “inferiores” al local, fue la marca de accesorios Kona Queen. Y aunque el showroom sigue vigente, Kona ya cuenta con local propio en el barrio porteño de Palermo.

Si bien son muchos los nuevos negocios comprendidos en esta tendencia, la gran mayoría dispone de alternativas en cuanto a los medios de pago. Las tarjetas de crédito y débito, el plan de las 12 cuotas impulsado por el gobierno nacional, o el “shop online”, son los elegidos por la gran mayoría de clientes.

Con 360.000 me gusta en Facebook y una antigüedad de 4 años, Tout Revient es una de las marcas referentes en este negocio. Para llegar a estos números, Delfina asegura que la clave está en las redes sociales y el pago de publicidad virtual.

Otros showrooms beneficiados por el online: Luli Lom, manejado por Lucía y Gabriela, A x I, y Mía Paix, especializados en accesorios femeninos. Todos aseguran que la difusión no hubiese sido la misma de no ser por Facebook.

La supervivencia comercial de este tipo de negocios, indicaron a iProfesional varios de sus impulsores, es fruto de un trato personalizado, diseños originales, y un largo camino para fomentar la venta individual.

Y, aunque no llegan a conseguir la masividad que brinda un local a la calle en las zonas de mayor concentración, sus ingresos –que van de los 20.000 hasta los 100.00 pesos mensuales– demuestran que es un negocio por demás de rentable.

Los “tradicionales”, en contra
Consultado sobre esta modalidad comercial, Vicente Lourenzo, secretario de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), expresó su malestar ante la proliferación de showrooms.

El empresario sostuvo que esta alternativa se basa tanto en la evasión impositiva como en la imposibilidad del vendedor de justificar el origen de la mercadería.

Lourenzo consideró, incluso, a estos emprendimientos como una manera de contribuir a un país anárquico: “Si desde el comercio no pagan impuestos así vamos a un modelo de país que va a tener muy poco futuro“.

Con respecto a su regulación, el secretario de la CAME aseguró que no existe una concentración por zonas, lo que hace aún más difícil su control.

Pirotécnico, el entrevistado sostuvo ante iProfesional que la operatoria de los showrooms está basada en “la evasión de impuestos y la compra ilegal de indumentaria en el exterior para luego venderla en el país”.

Por último, Lourenzo atribuyó la permanencia de estos comercios a la venta por Internet. “Se está consolidando en la medida que existan las variables para poder hacerlo. Claramente lo que puedo hacer es publicar el producto por Internet y lo vendo en mi casa”, dijo.

Diferencia en valores
Diego Migliorisi, socio gerente de la inmobiliaria homónima, vinculó el crecimiento de los showrooms al permanente aumento del alquiler en los locales comerciales.

“Un local de indumentaria tradicional antes necesitaba el poder de la vidriera y pagaba alquileres mucho más altos. Ahora, se reducen a una casa, barrio adentro donde no tienen tanto publico pero si el poder de internet hace que se difundan mucha más gente pueda ver ese producto y se acerque a ese lugar”, aseguró a iProfesional.

En esa misma línea, el experto inmobiliario indicó que los precios varían un 60% en relación a conseguir un inmueble para un showroom o alquilar un local.

“La diferencia de precios se percibe. Un local en avenidas como Córdoba o Scalabrini Ortiz está en 40.000 pesos mensuales, mientras que un departamento grande a dos cuadras de esas arterias sale 12.000. El flujo comercial de la avenida se está remplazando por lo que es la tienda virtual”, concluyó Migliorisi.

Variedad garantizada
Desde zapatos hasta collares. Las opciones que ofrecen los showrooms son muchas y variadas. En este caso, el ojo está puesto en las mujeres de entre 15 y 35 años que mantengan un estilo jovial.

Si bien la mayoría están concentrados en zona porteña, casi todos cuentan con un servicio de envíos a todo el país.

Algunas de las alternativas con mejor posicionamiento en las redes sociales:

 

  • Tout Revient: Con sede en la calle Mendoza en el barrio porteño de Belgrano, las hermanas Consani ofrecen distintos modelos de zapatos de cuero y plataformas.
  • Kona Queen Acces: Sortearon las dificultades y hoy cuentan con un local propio en la zona de Palermo. Desde anillos hasta collares combinables, el local ofrece la última moda en accesorios.
  • A x I access: Este showroom también ofrece accesorios de todo tipo. A través de su página web, se podrá acceder a los distintos modelos.
  • Mia Paix: Con venta al por mayor y también minorista, Macarena y Pamela se dedican a la venta de accesorios. Exclusivos diseños para sus mochilas, carteras y billeteras podrán encontrarse en su Showroom, ubicado en Palermo.
  • Luli Lom: Manejado por Gabriela y Lucía, este showroom funciona desde 2011 y ofrece diseños cancheros, precios accesibles y atención personalizada.